EL LUNARIO DEL AUDITORIO NACIONAL CUMPLE 20 AÑOS
     





Inaugurado el 4 de marzo de 2004 con el propósito de “recuperar la noche” y presentar eventos de alta calidad en un formato pequeño, bajo un concepto que permitiera un mayor acercamiento entre el artista y su público, el Lunario del Auditorio Nacional cumple 20 años de enriquecer de manera propositiva la oferta de entretenimiento en la Ciudad de México. Desde su apertura hasta hoy ha ofrecido casi 4 mil funciones de 1 mil 300 artistas y recibido a más de 1 millón 700 mil espectadores
 
El nombre del Lunario rinde homenaje a la Luna como fuente de inspiración artística e invitada en toda velada musical y alude también a la emblemática escultura de Juan Soriano (1920-2006) ubicada en la explanada del Auditorio Nacional. Este escenario fue diseñado por el arquitecto y escenógrafo Alejandro Luna (1939-2022), como un centro de espectáculos donde la intimidad y comodidad se conjugaran con un ambiente afable y de bohemia, en un contexto en el que la mayoría de las opciones para asistir a un buen espectáculo eran espacios masivos. El recinto abrió con una excepcional temporada de presentaciones de Tania Libertad y Armando Manzanero.
 
En estas dos décadas, por su flexibilidad, la variedad de su programación y lo heterogéneo de su público, el Lunario se ha convertido en referencia de calidad para artistas, promotores y espectadores. No sólo ha sido un foro alternativo para los talentos consagrados, sino también una plataforma para los jóvenes creadores y las nuevas vertientes, ya que se concibió como un espacio de apertura para dar cabida a las propuestas emergentes que no tenían un lugar donde presentarse. Diversos artistas nacionales y extranjeros que ahora llenan grandes foros iniciaron en el Lunario.
 
Tras su surgimiento, este recinto impulsó también a promotores y disqueras independientes y abrió el mercado para nuevos géneros. El modelo del Lunario inspiró a empresarios a repetir la exitosa fórmula e incluso propició el surgimiento de otros lugares, reactivando así la oferta nocturna en la capital del país.
 
Desde el inicio fue un espacio pensado para ofrecer espectáculos con tecnología vanguardista en audio y video, excelente isóptica para un máximo de mil 200 personas de pie y 500 sentadas, y la opción de consumir bebidas y alimentos cómodamente mientras se disfruta de la función. Su versatilidad le permite convertirse en escenario teatral, recinto para conciertos, sala de proyecciones, espacio para conferencias y eventos corporativos, presentaciones de libros, pista de baile y pasarela para desfile de modas. 
 
En estas dos décadas el Lunario ha vigorizado y diversificado la escena nocturna de la capital con opciones para todos los gustos y edades, lo mismo ha dado la bienvenida a quienes gustan de bailar sones cubanos que a los amantes del rock en todas sus vertientes, el pop, la balada, el jazz y los géneros y tendencias musicales más innovadoras, así como las artes escénicas que van del teatro a la ópera, la danza, el performance y espectáculos para público infantil.
 
Incluido en el ranking Top 200 Club Venues de Pollstar en la última década, el Lunario ha evolucionado para adaptarse a las necesidades y gustos del público del vertiginoso siglo 21 y cuenta con el respaldo de uno de los recintos más importantes del país, líder en venta de boletos en el mundo e ícono arquitectónico y cultural de México: el Auditorio Nacional, convirtiéndolo en la plataforma ideal para presentar e impulsar a todos los proyectos artísticos.