Gonzalo Villanueva Irañeta, director teatral argentino estrenará 3 obras en México
     





En el 2022 ganó en México un concurso patrocinado por el Fondo Nacional para la Cultura y las Artes (FONCA) y México en Escena, organizado por el Foro Shakespeare por su libro “La Casa por la Ventana”, obra que se publicó y se montó en ese mismo espacio y que en junio de este año estrenará su tercera temporada.
 
 
 
En España fue parte de Colaboratorio, un grupo de actores que trabajan con el maestro José Sánchez Mosqueda, lo que le dio muchas herramientas como dramaturgo. Asimismo, ha participado en varios festivales internacionales y sido docente en instituciones como el Instituto Nacional de Teatro, que lo seleccionó como profesor invitado de la Fiesta Nacional de Teatro 2023.
 
 
 
“Estoy en un momento muy particular porque hace 2 años y medio que llegué a México y ya tengo 3 obras montadas, dos libretos escritos estrictamente para México y en la primera mitad de este año repongo 3 obras que monté: “Medea o La Llaga en el vientre”, “La Casa por la Ventana” y “Titanio Tecol”, dice.
 
 
 
Titanio Tecol, todos los sábados de Marzo a las 20.30 hs en Foro Shakespeare
 
Medea o La llaga en el vientre, los viernes de Abril a las 20 hs en el Teatro La Capilla
 
La casa por la ventana, los viernes de Junio a las 20 hs en Foro Shakespeare
 
 
 
 
 
Villanueva Irañeta se estrenó como dramaturgo y director de teatro con la obra “Los infieles”, en el desaparecido escenario de “Bajo Corrientes”, en Buenos Aires, Argentina, en el año 2000, y desde entonces ha creado un amplio currículum, en el que ha trabajado como actor estable en el Repertorio Español de la Ciudad de Nueva York, la compañía de habla hispana más importante de los Estados Unidos; así como docente en talleres, seminarios de actuación y profesor universitario invitado y adscripto en países como Argentina, España, Brasil y México.
 
 
 
Como dramaturgo se formó con Jaime Chabaud, Juan Mayorga, José Sanchis Sinisterra y Ariel Barchilón y como docente tiene experiencia en trabajo social montando teatro comunitario en asentamientos de emergencia y teatro penitenciario. “Conocí a maestros y colegas que en su momento eran maestros de la actuación, maestros del teatro, que me enseñaron que más allá de los dividendos y los usufructos que podía llegar a darme mi trabajo, lo que debía consolidarme como artista era un compromiso ético, una forma de comprender el mundo y la sociedad en la que vivía, luego empecé a encargarme de la forma de vivir y de sustentarme económicamente”, reflexiona
 
En el 2004 obtuvo el segundo puesto en el Concurso Provincial de Guion y Dirección General de la Fiesta Nacional de la Vendimia, en Mendoza, Argentina. Mientras que en Buenos Aires montó “Edipo Rey”, de Sófocles, obra que recibió críticas importantes de grandes medios como la del periódico La Nación, en la que fue destacada como un “hallazgo”.
 
 
 
Otro de los momentos importantes de su larga trayectoria, que Villanueva resalta, es la beca Iberescena, a través de la que tuvo la oportunidad de entrenar con la compañía de teatro Contra El Viento, de Ecuador, y conocer su técnica de teatro en el teatro físico: “eso disparó en mí un montón de inspiraciones como actor y como docente”, comenta.
 
 
 
Cuando era niño, al argentino Gonzalo Villanueva Irañeta su familia lo llevó a conocer México. Ahí descubrió las distintas culturas del país azteca y quedó conmovido por el mosaico cultural que lo conforman. Varias décadas después, el realizador audiovisual, actor y director está a punto de estrenar tres obras de teatro en esta nación, donde reside desde hace dos años y en el que ha sido galardonado por su trabajo.
 
 
 
Como dramaturgo y director, Gonzalo ha abordado los temas como la construcción de la identidad, la construcción del poder y el realismo mágico. “Me gusta mucho el mestizaje y la polisemia, no contar el cuentito con una introducción, un nudo, un desenlace y una moraleja clara, unívoca, unidireccional; sino justamente lo contrario, que el espectador (…) se lleve el corazón lleno de emociones y la cabeza llena de preguntas, de inquietudes, seducido a imaginar”, menciona.
 
 
 
“Mi carrera tiene mucho más valor simbólico, valor artístico, que comercial. Yo nunca me focalicé en producto cultural, sino más bien en hecho artístico, esa es una de las primeras diferencias que me enseñó un maestro allá en los 90´s, distinguir si quería actuar o hacer teatro, ‘si quieres actuar hay un montón de posibilidades para un actor, hacer publicidad, hacer televisión, hacer cine; pero si quieres hacer teatro debes saber las condiciones de teatro, el compromiso, la carga horaria y posiblemente los sacrificios que implica el oficio’”, recuerda.
 
 
 
Otro tema que ha trabajado es el teatro sagrado --el cual distingue del religioso--, ya que lo define como el territorio de trascendente, de lo inefable, lo inasible y lo innombrable. “Me interesa mucho el territorio del enigma, del misterio, por eso es que estoy tan fascinado con la cultura mexicana, las mitologías mexicanas, porque son un territorio muy inspirador para generar universos posibles”, añade.
 
 
 
Actualmente, el realizador visual, actor y director de teatro se encuentra en una etapa de “cosecha” en términos de estudios formales, compromiso de servicio y formación de actores. Además, imparte talleres en Puebla (Puebla) y en Xalapa (Veracruz). “Estoy muy a toda marcha, con los motores encendidos y calientitos, así me encuentro en México”, finaliza.